UNA REINA EN LOS POSTRES
La avellana es la pareja ideal del chocolate, tanto como relleno de un pastel como crocanti de una tarta, dentro de unas crepes…
Con avellanas se elaboran algunos dulces tradicionales, como turrones o mazapanes, y helados muy sabrosos. Tostadas, trituradas y mezcladas con miel y pan rallado constituyen asimismo una merienda excelente.
Las avellanas pueden trocearse a cuchillo sobre una tabla o en un mortero. También pueden molerse en un molinillo eléctrico de café, procurando que no quede una pasta demasiado triturada o aceitosa.
Otra opción es adquirir granillo de avellana, listo para tostar y emplear como decoración de pasteles.
CREMA CASERA DE AVELLANAS Y CHOCOLATE
Las pastas de chocolate y avellanas son muy apreciadas por los niños para sus meriendas. Pero la comercial contiene poca avellana y demasiados azúcares y grasas poco sanas.
Puedes elaborar en casa una alternativa con avellanas tostadas (100 g), aceite de coco (50 g), cacao puro en polvo (30 g), leche vegetal (100 ml) y azúcar de coco (40 g) o de abedul. No queda tan fina como la comercial pero es más saludable e igual de sabrosa.
Peso | 1 kg |
---|